Redactado por Maria Serra
Abogada y mediadora
¿Qué es la mediación?
La mediación es un método alternativo de resolución de conflictos.
Alternativo, ¿a qué?, al proceso judicial, de ahí que en algunos casos se habla de la mediación como “sistema apropiado de resolución de conflictos” o incluso como sistema “adecuado” de resolución de conflictos, y en lugares muy evolucionados como Australia categorizan la mediación como método o sistema principal o primero de resolución de conflictos.
En cualquier caso, estaría dentro del paraguas de “los métodos de gestión de conflictos”.
¿Y en qué consiste la mediación?
Consiste en un proceso de NEGOCIACIÓN ESTRUCTURADA en que las partes designan a un tercero NEUTRAL, el mediador, que les dirige fundamentalmente en su proceso de diálogo y comunicación y les asiste en la consecución del acuerdo que ponga fin a su conflicto.
¿Qué hace el Mediador?
Un Mediador especialista dirige el Diálogo de las partes, puesto que en realidad la Mediación descansa sobre una idea muy sencilla y es la que considera que la manera natural de llegar a acuerdos es a través del DIÁLOGO.
¿Y cómo lo hace el Mediador que sea especialista?
- Organizando el debate entre las partes
- Permitiendo que se aclaren malentendidos entre ellas
- Deteniendo la discusión cuando ésta es improductiva o circular y no llega ya a ninguna parte
- Limpiando la comunicación, puliéndola.
Para ello se vale de un método o estrategias que la práctica ha sintetizado a través de las tres principales escuelas de mediación: la circular narrativa, la transformativa y la escuela de negociación de Harvard. Hay muchas más, diríamos que éstas son las tradicionales. Y las más modernas serían las actuales Mediación Insight y la Entrevista motivacional.
Como digo dichas escuelas proporcionan distintas estrategias o modos de abordar el conflicto entre las partes según su naturaleza. Así, si por ejemplo las partes vienen de una ruptura familiar en que hay un desequilibrio de poder entre ellas, el mediador utilizará el método de la escuela transformativa para trata de fortalecer a la parte más débil y reequilibrar la relación entre ambos; en cambio, si lo que observa el mediador es un discurso victimista en alguna de las partes, utilizará estrategias de la escuela circular narrativa para tratar de eliminar todo vestigio victimizador y hacer a las partes corresponsables de su protagonismo en la resolución del conflicto.
Además, como experto en comunicación se valdrá de un sinfín de herramientas o recursos que le validarán para ser el catalizador del acuerdo sin que en ningún momento él vaya a ofrecer a las partes ningún acuerdo en concreto sino que será la palanca o su facilitador.
En el siguiente vídeo podréis escuchar la explicación del Mediador especialista, Maria Serra:
2ª parte
¿De qué recursos se vale el mediador para que las partes puedan ir vislumbrando la manera de desarmar su conflicto?
El mediador es un experto en comunicación y para empezar se valdrá de la escucha activa, la empatía y la pregunta para indagar todo aquello que hay detrás de las posiciones de las partes.
Con la empatía conectará con las partes e intentará la conexión entre ellas. En los casos que sea necesario, hará sesiones privadas, los llamados caucus, lo cual le permitirá llegar a cuestiones de forma más profunda al sentir cada parte mayor libertad para expresarse sin temor a ser juzgado por ello por la otra parte.
Asimismo utilizará el parafraseo y la reformulación o replanteo para pulir la carga negativa del discurso de las partes y les devolverá su historia de una forma ordenada distinguiendo hechos -como dato objetivo- de las opiniones, -como dato subjetivo-, puliendo la carga negativa, identificando miedos, emociones, intereses y necesidades.
Utilizará la técnica del balcón de arriba, el brainstorming y el agente de la realidad para generar opciones, alternativas nuevas sin ojo crítico, con libertad, ampliando el ángulo de visión y superando bloqueos.
¿Cuáles son los atractivos de la mediación?
La mediación ofrece ventajas evidentes frente a la contienda judicial:
1.- la ausencia de formalismo legal lo hace un método ágil, rápido y eficaz y ello redunda en un abaratamiento de costes.
2.- su voluntariedad, el hecho de resolver las diferencias a través del diálogo y de una forma no impuesta conducen a su pacífico cumplimiento y elimina la incertidumbre que acarrea plantear cuestiones ante un órgano judicial
3.- su metodología permite la creatividad y la libertad lo cual amplía las opciones y abre al abanico de múltiples y variadas formas de dar solución al conflicto fuera del encorsetamiento legal.
4.- pero sin duda el hallazgo o tesoro oculto de toda mediación que llega a buen puerto es el fruto que el proceso de diálogo trae y es la restauración de la relación entre las partes, de ahí que la mediación pueda ser considerada como el método adecuado de resolución de conflictos de la esfera familiar, de la empresa, vecinales, o cualesquiera conflictos económicos porque la mediación tiene el efecto de preservar las relaciones comerciales, económicas o humanas de las personas.
En el siguiente vídeo podréis escuchar la explicación de la señora Maria Serra, como mediador en Barcelona: